jueves, 6 de septiembre de 2018

Anandá Hotel Boutique


Calle del Cuartel No. 36-77,
Cartagena, 00001, Colombia

ananda-boutique.hotel-rn.com

En el centro histórico de Cartagena el hotel Anandá es un pequeño oasis. No es que Cartagena necesite un refugio donde aislarse, porque la ciudad es espléndida y salir a la calle una fiesta para los ojos y para los recuerdos. Cartagena es acogedora y no abruma. Pero apetece
llevar su aroma a un entorno más doméstico como es el lugar donde el visitante va a alojarse. Está bien vivir en la intimidad este mundo con resonancias antiguas, provincianas, con un paso del tiempo más lento que el de la calle y tener la experiencia de haber puesto el reloj marcha atrás para recuperar sensaciones, para abrir la puerta a un pasado al que aún podemos regresar.


El Anandá ocupa una antigua casa señorial con un bello patio interior, ajardinado y que respira los aires del trópico. La entrada al hotel, en un espacio de luz muy tamizada, marca un corte con el ambiente exterior y señala la llegada a un lugar sofisticado donde la decoración se ha cuidado con
esmero. Una sucesión de detalles hace sentir a quien se aloja envuelto en una atmósfera cálida y serena.

La piscina, no muy grande porque estamos en un edificio clásico en el corazón mismo de la ciudad amurallada, se sitúa en un segundo patio y una terraza
sobre el último piso ofrece, para dedicarle el mejor momento al descanso, las vistas más sugerentes sobre la ciudad.
Dicho esto, el servicio es excelente y las habitaciones espaciosas y cómodas. No están saturadas por una decoración excesiva. Parece,
más bien, que se ha optado por cierta contención en el interior de las habitaciones. por crear en ellas un ambiente más discreto y por dejar para los espacios comunes los detalles que proyectan el encanto que rodea a todo el entorno.

En el casco antiguo de Cartagena, además de hoteles grandes, que también los hay, hay una buena oferta de hoteles ‘boutique’, pero dentro de ella el Anandá destaca y seduce por su singular atractivo.

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viernes, 1 de junio de 2018

Hotel Le Dixseptième


Rue de la Madeleine, 25
1000 Bruselas – Bélgica


http://www.ledixseptieme.be/


En el centro de Bruselas, a menos de cinco minutos andando a la Grand Place o a las Galleries Saint-Hubert, se encuentra el hotel Le Dixseptième. La situación es inmejorable porque además se halla muy próximo a la estación central de trenes en un país donde el ferrocarril es el medio de transporte preferido para
moverse de una ciudad a otra y también para llegar desde el aeropuerto a la capital.

Buena localización acompañada de lujo, pero de lujo confortable y no apabullante, un lujo acogedor que en ningún momento desborda el ambiente cómodo donde sentirse bien, son las señas de identidad de Le Dixseptième.


El nombre da una pista de lo que el hotel ofrece. Está instalado en una casa señorial del siglo XVII. Una casa grande pero no enorme construida con la elegancia de lo que debía ser una residencia noble de la época. El hotel ha tratado de conservar parte de los aires del pasado, pero no ha
puesto barreras al presente ni a la modernidad. Si algunos espacios comunes aparecen con cortinajes, porcelanas y muebles clásicos, otros están decorados con pinturas contemporáneas y elementos funcionales para jugar con el contraste.

El ambiente de hotel es 
discreto. Una recepción pequeña y apartada sitúa al conjunto más cerca de una casa elegante que de un establecimiento hotelero. Las escaleras de estilo palaciego, pero sin abrumar, los patios interiores que dan un aspecto doméstico a las habitaciones y a las estancias que dan a ellos, la decoración cuidadísima… 
sitúan al hotel en un elevado nivel de excelencia.

Las habitaciones amplias para un perfecto acomodo aunque sin excesos, el comedor de aspecto regio donde desayunar y comer y un servicio impecable conceden todos los títulos a Le Dixseptième para tenerlo muy en cuenta en una estancia en Bruselas.

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martes, 3 de abril de 2018

Hotel Faro en Isla Pancha

Ribadeo, Lugo, Galicia

faroislapancha.es

Los viajeros curiosos estamos de suerte en España desde que en abril del 2017 abrió en nuestro país el primer faro convertido en hotel. El Hotel Faro nace con la ilusión de dar a los huéspedes la posibilidad de disfrutar de un paisaje espectacular, mientras se alojan en el faro.


En Galicia, concretamente en la ría de Ribadeo (Lugo), a 2 km de la villa homónima y a ocho de la playa de las Catedrales se encuentran Isla Pancha y su faro, reconvertido ahora en alojamiento turístico tras no pocos trámites burocráticos.


El faro de Isla Pancha comenzó a funcionar en el año 1860, y estuvo en servicio hasta 1983. En total, bastante más de cien años sirviendo de guía a los barcos que transitaban por la peligrosa costa gallega.

Ahora, gracias al impulso de un empresario de la zona se puede disfrutar de una estancia en la antigua residencia del farero, un edificio de mediados del siglo XIX donde el espacio se ha dividido en dos apartamentos de unos 40 m2 cada uno.

Cada apartamento, íntimo y acogedor y con capacidad para cuatro personas, cuenta con dos habitaciones y un baño, y su propia zona ajardinada donde relajarse con las vistas al inmenso mar y disfrutar de románticas puestas de sol.

Todo el faro ha sido restaurado, incluyendo la escalera de caracol interior hecha de forja, para que quienes se alojen puedan subir hasta la linterna y disfrutar desde allí de unas vistas insuperables de la ría de Eo y el litoral cantábrico.

El Faro Hotel es una opción original para los que sabemos apreciar las comodidades de un buen hotel unidas a la experiencia única de cerrar los ojos y dejarse acunar por el sonido de las olas al chocar contra las rocas de esta maravillosa tierra que es Galicia.

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