Tulum - México
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Ubicada cerca de las ruinas mayas de Tulum (Yucatán) y enfrente de una playa paradisíaca propia del Caribe, el lugar escogido demuestra que se trata de una localización ideal para quienes buscan, además de exclusividad, privacidad absoluta.
El origen de esta, para algunos, extravagante idea parte del coleccionista de arte Lio Malca, quien viendo el potencial de esta propiedad abandonada después de la muerte de Escobar en 1993, transformó la mansión y las villas de su alrededor en un lujoso hotel.
Impecablemente decorada con la producción de artistas contemporáneos como Basquiat, la mansión se ha convertido en un atractivo importante para quienes buscan lo singular. Ningún viajero amante de la exclusividad y con cierto gusto por la fusión entre realidad y ficción debe dejar de conocerla.
En 2015 abrió con 9 habitaciones y ahora cuenta ya con 35 más que aprovechan los 180 metros de idílica playa que bordea el hotel. Contrasta el turbio pasado de este lugar y la serena ambientación tibetana que hoy envuelve algunas estancias y persiguiendo el objetivo de ofrecer paz y tranquilidad.
Con sorpresa descubrimos que las obras de arte que adornan cada habitación van rotando cada cierto tiempo por el hotel, de modo que los huéspedes que decidan repetir su estancia aquí podrán disfrutar de un cambio de ambiente sin perder el aroma de la atmósfera que ya conocen.
Para quienes decidan alojarse en el hotel, y para terminar el día, qué mejor experiencia que ponerse en la piel de un capo, multimillonario y extravagante, y tras un relajante baño al anochecer en su piscina privada, subir la escalera de caracol que conduce a la azotea
y disfrutar de los mejores cócteles y las mejores vistas que ofrece el paisaje caribeño.
Cerrando un momento los ojos, podrán imaginar una escena de película como es tener al célebre Pablo en la mesa de al lado… Leer más…