Commune by the Great Wall Kempinski es un museo de arquitectura, una exposición de diseño y un ejemplo del modernismo vanguardista. De hecho, turistas de la arquitectura de todo el mundo viajan a este lugar para recorrer sus salas de piedra y madera brillante y admirar el trabajo de veinticuatro de los principales arquitectos de Asia.
Sin embargo, para entender del todo la experiencia del Commune, hay que vivirla. El hecho de apreciar el valor estético de estas estructuras con el escarpado campo de China como telón de fondo es una cosa, y otra muy distinta, despertarse y contemplar las exuberantes colinas verdes desde unos ventanales del suelo al techo, y vivir rodeado de unos interiores de vanguardia espectaculares y unos muebles modernos clásicos, diseñados por Marc Newson y Karim Rashid, entre otros.
La originalidad del proyecto Commune by The Great Wall impide siquiera clasificarlo. No tiene habitaciones numeradas según el piso correspondiente, de modo que no es un hotel convencional, pero tampoco es un “aparthotel” ni nada por el estilo, porque las casas que lo componen son todas distintas, y rechazan cualquier intento de etiquetarlas.
Además de ser enormes (tienen de cuatro a seis habitaciones), las once villas originales son, fundamentalmente, unas mansiones experimentales de lujo. Las cerca de 31 villas nuevas son fruto de la alianza con la compañía hotelera Kempinski y están cortadas por el mismo patrón experimental que las del resto del Commune, aunque tienen un tamaño (y un precio) más adecuado para huéspedes particulares que para magnates.
Si le interesa la arquitectura moderna y la hostelería de lujo de la mayor categoría, no dude en alojarse en una villa. El resto de los mortales nos conformaremos con las nuevas construcciones de Kempinski: la muestra más representativa de la maravilla arquitectónica china más reciente.
Todo con vista a la Muralla China y a menos de una hora de Beijing.
La pagina web
jueves, 29 de enero de 2009
Commune by the Great Wall Kempinski
miércoles, 28 de enero de 2009
La Bandita



En el corazón de la Toscana, al sur de Siena, en el Val d’Orcia, al final de un camino sin pavimentar marcado con cipreses y rodeado de pastos y ovejas, se encuentra La Bandita, el hotel rural de ocho habitaciones más de moda en este momento.
Aprovechando los edificios de una antigua granja toscana, se ha construido un moderno y lujoso hotel que combina a la perfección diseño y sencillez.
Por su situación en la cima de una colina, desde todas las habitaciones, así como de la piscina y el porche, se disfruta de las más maravillosas vistas sobre el valle.
The Vine
Una piscina panorámica sobre Funchal con vistas que se pierden en el mar, una decoración exquisita de lineas rectas y suaves blancos, una disposición elegante de cada elemento que respira perfección y cuidado y una atmósfera tanquila es lo que ofrece el último de los
viernes, 16 de enero de 2009
Adrère Amellal



El incomparable marco natural en el que se encuentra a los pies de la “Montaña Blanca”, frente al Lago Siwa y con las dunas del Gran Mar de Arena de fondo hacen de este ecolodge el alojamiento ideal para vivir el Sáhara en toda su plenitud sin romper la armonía con entorno natural.
El Adrère Amellal es un auténtico hotel ecológico. El diseño, la mano de obra y los materiales empleados en su construcción proceden de la zona, y todo lo que se come (aviso a los carnívoros: el menú es fundamentalmente vegetariano) se cultiva en la huerta.
Las 34 habitaciones y suites están amuebladas con sencillez, pero con gran calidad, de modo que no se deje desanimar por la idea de una puerta de palma. A pesar de la falta de electricidad, un sistema de calentador de gas permite que haya agua caliente, y la iluminación nocturna procede de faroles y velas.
Insistimos: no hay recepción, aire acondicionado ni electricidad, sólo una piscina y una sensación de absoluta tranquilidad y aislamiento. Si quiere hacerse una idea de cómo vive un bereber en el Sáhara, la forma más sencilla y agradable de hacerlo es alojándose en el Adrère Amellal.
La página web
Romaneira, "la casa de los sueños"



miércoles, 14 de enero de 2009
Elquidomos. Astro-hotel en Chile
Te presentamos Elquidomos. Es el primer Astro-hotel en Chile, ubicado casi a 600 km al norte de Santiago, en el centro del valle de Elqui, famoso por su energía y cielo despejado durante todo el año.
Elquidomos es un conjunto de 7 Edocomos, exclusivamente amuebladas para disfrutar de la magia y la transparencia del Valle de Elqui.
Los propietarios se dieron cuenta de que las formas y filosofía de las construcciones geodésicas -domos- eran perfectas para su objetivo, y fue así como definieron los requerimientos básicos para el diseño final: la cama debía situarse lo más alta posible y sobre ella tener la posibilidad de abrir el techo del 'domo' para observar con calma las estrellas; y contar con todas las comodidades necesarias en el interior de la habitación para no enturbiar de modo alguno las sensaciones que una experiencia así puede producir.
ElquiDomos pretende ser un lugar mágico, de descanso e introspección, con un servicio al gusto de quienes huyen de las aglomeraciones, buscan comodidad , contacto con la naturaleza, y una atención personalizada.
martes, 13 de enero de 2009
Giramisu Cave Hotel
En lo que fue un antiguo monasterio de la Capadocia se ha abierto un pequeño hotel que viene funcionando desde 1999.
Sus dependencias, por supuesto restauradas, conjugan las edificaciones que en su momento ampliaron el convento con los espacios excavados en la roca, como corresponde a la arquitectura típica de la región.
Las habitaciones ocupan algunas de las antiguas celdas. Y el conjunto -salas, comedor, pasillos…- decorado en estilo tradicional, tiene el sabor de las construcciones de otro tiempo marcadas siempre por la disposición irregular de los espacios.
El hotel es de un lujo modesto, pero tiene todo el encanto de su localización única.
La página web
Leer más…lunes, 12 de enero de 2009
Harlingen Harbour Crane
¿Dispuestos a considerar un hotel realmente distinto? Una grúa del puerto de Harlingen en Holanda, se ha convertido en hotel. Estuvo activa hasta los años noventa. La rehabilitación de la estructura metálica para convertirla en en un espacio acogedor -para sólo dos huéspedes- ha durado dos años. Pero el resultado ha sido sobresaliente. Hoy se considera un monumento industrial, situado, además, junto al centro histórico de la ciudad.
Comodidades y modernidades: todas. Un par de ascensores conducen desde el suelo a lo alto de las patas donde se hallaba la sala de manejo y la maquinaria y donde se sitúa ahora el espacio habitable. Desde él se contempla una vista insólita del puerto y se ofrece, además, la ocasión de vivir una experiencia única.
La página web.
Propeller Island City Lodge
¡No dejes de visitar la web con detenimiento! Así lo hemos descubierto nosotros.
EME fusion hotel

