Dwarika’s Hotel

Dwarika s Hotel
P.O.Box-459, Battisputali
Kathmandu, Nepal

Es casi un museo. Y en Katmandú apetece especialmente alojarse en un lugar así. Tradición, viejos mitos que afloran a través de las piedras o de la madera de los edificios ...
P.O.Box-459, Battisputali
Kathmandu, Nepal


www.dwarikas.com

Es casi un museo. Y en Katmandú apetece especialmente alojarse en un lugar así. Tradición, viejos mitos que afloran a través de las piedras o de la madera de los edificios, una espiritualidad que se mezcla con la tierra y que da un

toque mágico a todo aquello que tiene sabor a antiguo... la atmósfera de Katmandú es lo que seduce al viajero y aquello en lo que el viajero desea envolverse para disfrutar de una ciudad llena de encantos y única.

El Dwarika’s Hotel ofrece

justamente eso.  Pone sus cimientos en las raíces de la historia y crea el ambiente cargado de aromas que el viajero busca y en el que encuentra las esencias de Katmandú.

Hablamos, sin embargo, de un hotel grande. Hay que avisarlo, porque sus

características encajarían mejor en un edificio más pequeño y familiar. Y hablamos de un hotel moderno, espacioso y dotado de todos los servicios.

Lo que ocurre es que se construyó siguiendo la

tradición de los viejos palacios nepalíes, buscando la armonía de los espacios y el refinamiento en las formas. En la decoración se han utilizado innumerables piezas de procedencia antigua que se conservan aquí con la naturalidad de lo que ha recuperado el lugar que le corresponde

y que contribuyen a crear una atmósfera doméstica y evocadora.

Dicen, quienes han estado en él, que el hotel es un oasis dentro de la capital nepalí. Se encuentra a muy poca distancia del venerado templo de Pashupatinath,

posee tres restaurantes, spa... En definitiva, reúne todos los encantos y la comodidad que se pueden desear y que son un regalo añadido a la suma de atractivos que ofrece la visita a Katmandú.